sábado, 10 de marzo de 2012

Creando o descreando...

Hoy me siento más anormal que nunca, veo a mi alrededor todo aquello que es considerado "normal" y me siento completa y totalmente fuera de orbita.
Hoy es normal ser madre soltera a los 17 años, es normal que mamá y papá se separen porque... el amor se terminó, la infidelidad es moneda corriente, el "te amo, pero tengo otras necesidades" es una frase implantada en las charlas de cada día.
Y me encuentro frente a la inquietante pregunta de: "¿Hacia donde vamos?" o mejor dicho "¿Qué estamos creando?".
Hace unos días pude ver un filme que hablaba de la familia, donde estadisticamente hablando, se podia observar que un niño creciendo sin la figura paterna tenía 5 veces más posibilidades de caer en drogas, abusos, y carcel que un niño que crece con la figura paterna.
Ser padres es más que el mero acto sexual, basado en la lujuria y el deseo momentaneo, ser padre no es alimentar al niño y darle un techo, ser padre es infundir valores en ese niño, para que cuando crezca se convierta en un hombre/mujer de bien, alguien útil para la sociedad, ser padres es una responsabilidad que yo misma estoy dispuesta a aceptar que no estoy preparada para afrontarla. A veces me encuentro con personas que despues de 2 o 3 niños, me dicen: "Estamos buscando otro", y al preguntar el por qué, responden: "Porque son lindos los bebés". No pueden siquiera imaginar mi expresión al escuchar algo asi, creo que si tuviera una USI en mano, les volaria instantaneamente la cabeza. ESO NO ES SER PADRES.
Creo que el meollo del por qué vivimos de cabeza es precisamente ese, vivimos en una sociedad donde el ser padres es... bueno, si alguno sabe lo que es se merece un Nobel.
Como adulto joven que soy, insto a aquellos que todavía no son padres a reflexionar al respecto, a pensar que no es sólo un bodoque que come y hace ruiditos, es una vida, es un futuro médico, una futura maestra, un futuro presidente...
Es fácil en este país, que cuando algo no te gusta simplemente hacen paro, cortan calles, queman ruedas. Hagamos el trabajo dificil... el que dá mejores resultados a futuro, formemos hombres y mujeres con valores, con moral, con ideales firmes y claros, tratemos de primero saber quienes somos, antes de traer al mundo a una vida que ni siquiera nosotros entendemos.

Somos lo que somos...

Se que soy diferente, y que a veces mis acciones confunden a mas de uno y con las vasijas al tope y a punto de una explosión nuclear eh decidido darme a conocer (a los que no me conocen, para 2 o 3 esto no va a ser novedad), a ver si así cual wikipedia vía nota de facebook logramos que algunos dejen de perseguirme con la cruz y el vasito de agua bendita, porque estoy empezando a sentirme como un vampiro en Buffylandia.
Tengo un corazón que paso por muchos paisajes y climas, tengo tantas marcas y cicatrices que a veces siento que ya es ireconocible. Dami alega que estoy demasiado acostumbrada a enfrentarme sola a la vida, y es cierto.. Creo que en toda esta transición de empezar una vida de a dos, lo que mas me cuesta es compartir los problemas, pero no porque no confió en el, ni porque lo considere poca ayuda. Sino que estoy tan acostumbrada a tener mis pelotitas en MI órbita que cuando alguien toca alguna, todo mi universo se desmorona. Lo admito, soy especial (no en el mejor sentido). Otros un poco mas atrevidos me quieren hacer 'volver al camino', convencidos que por pensar distinto estoy en un camino equivocado. Mas de uno ya ni siquiera se molesta en preguntar como estoy, simplifican todo con un 'es una causa perdida'. Pero lo que pasa en mi exterior es tan distinto a lo que pasa en mi interior que se podría decir que somos dos personas diferentes, (necesito terapia??). Lo que a veces se ve desde afuera es lo opuesto a lo que realmente me pasa.. Soy un digno personaje de Lost o Fringe.
A simple vista puedo no ser la persona mas tolerante, pero aprendí a aceptar al otro con su forma de ser, porque se que yo también tengo lo mio.
Puedo ser mal hablada, pero nunca te voy a decir intencionalmente algo que pueda herirte, se cuando parar.
Puedo ser impaciente, pero nunca perder la esperanza, aprendí que tarde o temprano todo llega.
Puedo no ir rigurosamente a un templo, pero mi templo (mi corazón) siempre esta abierto para sentir a Dios.
Puedo caer una y mil veces, y sentir que todo pierde sentido, pero SU mano siempre me levantara.
Puedo colgarme durante meses, sin ver ni hablar con nadie, pero aquellos que me conocen saben cuanto los amo.
Puedo no llamar por teléfono o textear cada día, pero el día que me necesites voy a correr en tu ayuda.
Puedo ser indiferente a doctrinas, mandatos y religión, pero nunca dejare de emocionarme ante las pequeñas demostraciones que Dios me da cada día, recordandome que dio su vida por mi, no porque lo merezca, no porque sea una persona que haga caridad, que nunca me enoje, que ame a mis enemigos, que siempre ponga la otra mejilla, que instruya a otros o que tenga un titulo colgado en la pared. Porque no se si algún día alcanzaré merecer lo que Dios me dio. Nunca podré decir: 'Dios me dio tanto porque la verdad lo merezco'. No, El me dio y me da tanto porque ve en mi lo que nadie ve, El ve mi interior, sabe que detrás de mi rebeldía, de mi mal carácter, de mi poca sujeción, de mis ausencias, soy su pequeño tesoro, El sabe que lo amo mas que a mi vida, aunque no se lo diga en un templo cada sábado. El sabe que amo a mis amigos aunque no los visite o les escriba a diario, sabe que aunque yo me rebele contra las doctrinas, jamás haría o diría algo que haga caer a alguien, sabe que aunque caiga, durante la caída no le voy a reclamar, porque se que caigo por mi débil humanidad, sabe que aunque soy mal hablada siempre le hablo y le voy a hablar con todo el amor que puede tener este corazón lleno de marcas y cicatrices.
Porque dentro de mi imperfección, soy aquello que El un día pensó..
Quizás muchos no entiendan el por que de mi forma de ser, tal vez incluso aquellos que dicen conocerme en estos momentos dicen: Sary esta re perdida. Pero eso es porque no saben lo que EL sabe, que ni la muerte, ni la vida, ni ángeles o potestades, nada sobre la tierra o debajo de ella me separa jamás del amor de Dios.

Dias en los que uno quiere irse a la mierda

Lunes, es extremadamente difícil volver a arrancar después de un día de descanso (si es que tuviste dicha suerte). Los lunes todo el mundo esta de mal humor, te hablan mal, te empujan, te rompen soberanamente las pelotas, y siendo las 19 hs las ganas de irse a la mierda se hacen notorias.
Martes, tan lejano al viernes, es el peor día de la semana, desde el primer parpadeo en la mañana nos hace sentir que estamos a años luz del fin de semana, y se nota en las caras de todos, siendo las 18 hs empezamos a hacer la fila para comprar un boleto sin retorno a la mierda.
Miércoles, nos despertamos con esperanza, estamos justo en la mitad de la semana y sentimos que si llegamos hasta acá podemos seguir un poco mas, esperanza que se destroza al mediodía cuando nos cruzamos con el primer hijo de puta que, pensando solo en si mismo, se cree que tiene el derecho de cagarnos el día como se le de la gana, ya sea colandose en el bondi, o cobrandote de mas en el kiosco, o si laburas en comercio tratandote como a servidumbre, llegadas las 17 hs, somos capaces de vender a la abuela por irnos a la mierda.
Jueves, la remamos de la mejor manera posible, tratando de poner la mejor cara, que a media tarde es una mezcla de hannibal con chuky. Si... Con esos ojos y todo. 16 hs y no hay ni facebook, ni twitter, ni radio que nos suba el animo.
Viernes, las ganas de irse a la mierda aparecen desde temprano, la gente se posesiona de una desconsideración casi irracional, te hablan y no escuchan, no se escuchan ni a si mismos, todos creen tener la razón y a nadie le importa si esta rompiendole las pelotas al de enfrente,cualquier cosa les viene bien para joder. siendo las 15 hs no solo queremos irnos a la mierda, sino que además suplicamos por un katrina, que arrase con esta sociedad egoísta e irracional.
Sábado, para aquellos afortunados que trabajan de lunes a viernes lo peor ya paso, y solo queda relajarse hasta el maldito lunes, para aquellos que trabajamos de lunes a sábados lo peor esta por venir, desde el chofer del bondi hasta el diariero tiene cara de sábado, llegamos al trabajo arañando las paredes y en el preciso instante en el que colgamos el abrigo nuestra boca se abre y sale el :'Me quiero ir a la mierda'. Una persona tras otra nos va cagando el día, todos tienen una queja, un reclamo, un problema, todos quieren que hagas todo sin importar siquiera como te sientas. El sábado desde la mañana hasta la noche es un constante 'me quiero ir a la mierda'.
Cuando por fin vamos de salida, el colectivo para no perder la costumbre nos hace esperar 20 minutos, 20 minutos que un sábado se sienten como 40. Y arrastrandonos ya sin fuerzas llegamos a la cama, ataúd mágico del cual desearía no salir por al menos 2 días enteros. Cuando menos lo esperamos llega el lunes... Y honestamente después de este descargo solo me queda decir: 'Me quiero ir a la mierda'.